La obra “Silencio”, de la compañía Daniel Abreu, discurre en una sucesión de cuadros. Tres intérpretes (Anuska Alonso, Dácil González y Daniel Abreu) presentan un paisaje que va desde la oscuridad y el silencio, al juego con el ritmo y la luz. Cuerpos ingrávidos, camisetas que cantan, lluvia de plástico, una mujer ciervo, unas palabras a un padre. Todo aquello que nos hace volver a un lugar de calma. Son cuadros poéticos, que de alguna manera conectan con algo muy íntimo de cada uno.

 

Las connotaciones psicológicas también están presentes en este nuevo trabajo de Daniel Abreu. Acciones e intenciones físicas que transforman su significado, una simbología que crea paisajes e imágenes en acción. La idea de la levedad, de lo impermanente, de la ingravidez con el físico en el límite. Desde lo simple. Desde el lenguaje del cuerpo…

 

La excelencia técnica y artística de los bailarines, la impresionante carga expresivay la belleza de las imágenes y movimientos de la coreografía, hacen de este espectáculo una experiencia emocional inusual… Daniel Abreu es Premio Nacional de Danza 2014.